
Howard ASHMAN, letrista
Howard Elliot Ashman nació en el seno de una familia judía el 17 de Mayo de 1950 en Baltimore y falleció víctima del sida en New York el 14 de Marzo de 1991. Fue un guionista, letrista y director centrado sobre todo en el teatro musical y su mayor fama le viene por sus trabajos con Alan Menken en los musicales: Little Shop of Horrors, The Little Mermaid, Beauty and the Beast y Aladdin.
Estudió en la Universidad de Boston y completó su Master en la Universidad de Indiana. Fue director del WPA Theater de New York. Comenzó escribiendo obras de teatro de texto, siendo Cause Maggie’s Afraid of the Dark, Dreamstuff y The Confirmation, sus primeros guiones.

Howard Ashman con Alan Menken
Cuando decidió hacer un musical buscó un compositor con el que trabajar y fue un amigo común quien presentó a Alan Menken & Howard Ashman que escribieron su primer musical en 1979 bajo el título de God bless you, Mr. Rosewater, que marcó el punto de partida de la pareja.
Little Shop of Horrors inspirado en la película de terror dirigida por Roger Corman, se estrenó en el WPA Theatre del off-Broadway que dirigía Ashman en 1982. Menken se encargó de la música y Ashman del libreto, letras y dirección ganando el premio Drama Desk por las letras. Este trabajo llamó la atención de David Geffen, magnate de la empresa de discos que les compró los derechos sobre el musical para llevarlo al cine y dirigió en 1986 Frank Oz.

Howard Ashman con Marvin Hamlisch
Ashman se encargó del guión para adaptar la historia al cine, siendo totalmente fiel al musical original, pero al ver que en los preestrenos algunos niños salían asustados, el productor obligó a rodar un nuevo “final feliz”. Ashman también escribió las letras de dos nuevas canciones para la película: “Some Fun Now” y “Mean Green Mother from Outer Space” que fue nominada al Oscar como mejor canción original, pero no ganó.
El mismo año 1986 Ashman se encargó nuevamente del guión, libreto y letras de su siguiente musical, confiando en Marvin Hamlisch para que se ocupase de la música. “Smile” estába basado en la película de 1975 dirigida por Michael Ritchie con Bruce Dern, Barbara Feldon y una jovencísima Melanie Griffith sobre los problemas en un concurso de belleza, que conta todo pronóstico fue un fracaso.
En 1988 llegó el contrato con Disney y su primera colaboración fue poner letra a la canción “Once upon a time in New York City” para la película Oliver & Company.
En 1989 el primer largometraje animado con Alan Menken de nuevo, The little mermaid que le representó su primer Oscar por mejor letra original para la canción “Under the sea”.
En 1990 escribió la letra de “Wonderful way to say no” para el corto animado All stars to the rescue y en 1991 otra vez con Menken escribió “La bella y la bestia” (Beauty and the Beast) que le supone su segundo Oscar a la mejor letra original, por la canción que da título a la película, si bien fue recogido en su nombre a título póstumo por su compañero Bill Lauchman.
El último proyecto del tandem Menken-Ashman sería Aladdin y aunque al morir dejó escritas 11 canciones para la película, sólo se utilizaron 3, por lo que recurrieron a Tim Rice para completar la película.
Tras su muerte Disney fijó sus ojos en Broadway y encargó las adaptaciones de películas a musicales, siendo Beauty and the Beast la primera con un éxito extraordinario, seguida por The little mermaid que no corrió igual suerte y Aladdin que se quedó en una atracción de un parque Disney. (Ver más información al respecto en el apartado dedicado a Alan Menken).
Su visión y concepto del musical fue vital en la creación de los musicales Disney de la época, que ya no volvieron a ser lo mismo sin él. En el DVD de Beauty and the Beast, en los extras el mismo Alan Menken comenta como cuando estaba en su lecho de muerte, le consultaban cada cosa y tras ponerle al teléfono la grabación de una determinada canción, Ashman con un hilillo de voz sugería: “Más… Streisand” pidiendo que imitaran la forma de cantar de la estrella. Al final del DVD hay una dedicatoria que dice:
A nuestro amigo Howard, que dio su voz a una sirena y su alma a una bestia. Te estaremos agradecidos eternamente.
(Howard Ashman 1950 – 1991).